El 82% de las fundaciones políticas y entidades vinculadas son opacas

De las 49 fundaciones políticas analizadas en la muestra, solo cuatro (8%) logran niveles óptimos de transparencia: F. Sabino Arana (PNV), que cumple con la totalidad de indicadores (15); F. Alkartasuna (Eusko Alkartasuna), con 14 puntos; F. Josep Irla (Esquerra Republicana), 13, y F. Rafael Campalans (PSOE), que cierra el grupo de fundaciones catalogadas como transparentes con 12 puntos. Un 10% forma el grupo de translúcidas y un mayoritario 82% continúa siendo opaco.

Estos datos se obtienen mediante el análisis de las páginas web de las 49 fundaciones y entidades vinculadas a los partidos políticos. El documento analiza la transparencia voluntaria, evaluando que publiquen online información relevante como la misión, actividades, órganos de gobierno, estructura directiva, políticas o información económica.

Estos resultados ratifican la denuncia que la Fundación Haz viene haciendo desde hace años (Vid. ¿Fundaciones políticas o recaudadoras de fondos?): “Estas instituciones constituyen, en la mayoría de los casos, simples instrumentos para captar subvenciones públicas y donativos privados y, en la medida que su control sea más laxo que el de los partidos, no puede extrañar que estas vayan en aumento para evitar la fiscalización del Tribunal de Cuentas”.

Con motivo de este aumento, la muestra analizada ha pasado de 39 a 49 fundaciones, la mayoría de las cuales no cuenta con una página web. Por esta causa los porcentajes de cumplimiento han disminuido en la totalidad de áreas examinadas.

El número de instituciones que no disponen de web ascienden a 28, es decir, un 57% de todas las fundaciones y entidades vinculadas. Esta omisión supone el incumplimiento de la Ley Orgánica 5/2012, de 22 de octubre, sobre financiación de los partidos políticos, que establece en la disposición adicional séptima, apartado cinco, que: “Las fundaciones vendrán obligadas a hacer públicas, preferentemente a través de su página web, el balance y la cuenta de resultados de forma que esta información sea de gratuito y fácil acceso para los ciudadanos”.

Destaca que solo dos fundaciones (Popular de Estudios Vascos y Sabino Arana) cuenten con un código de buen gobierno; que solo un 16% publique información económica, y que un discreto 18% y 24% ofrezca datos sobre su estructura directiva y su órgano de gobierno respectivamente.